La intuición (del latín intueri “contemplar la esencia”) es un concepto de la epistemología que describe el conocimiento que es directo e inmediato, sin intervención de la deducción o del razonamiento; es decir, que es evidente.
No obstante, la intuición ni es inmediata ni es directa, solamente que de forma aparente parece no existir razonamiento alguno y se percibe como premonición.
¿Entonces qué ocurre realmente?
Las teorías del conocimiento proponen lo siguiente:
Existen dos tipos de conocimientos, el implícito y el explícito; en el conocimiento implícito, la respuesta se da sin conciencia de la misma y sin esfuerzo, es decir se usa sin pensar en ello, en este conocimiento participa principalmente en cerebro reptiliano y límbico.
Mientras que en el conocimiento explicito, se requiere realizar un esfuerzo consciente para utilizar dichos conocimientos, exige de atención sostenida y selectiva. El conocimiento explicito involucra al neocórtex mediante la activación de los lóbulos prefrontales.
Los científicos consideran que no es sencillo poder distinguir entre estos dos tipos de conocimientos debido a que ambos pueden verse influidos. Existen investigaciones realizadas por el Instituto Karolinska (Suecia), el Instituto Nacional para los Trastornos Neurológicos y el Ictus de los Estados Unidos, que llevaron una investigación liderada por el profesor Fredrik Ullén, para descubrir la importancia del aprendizaje implícito en nuestro cerebro y como este se apoya en áreas primitivas del mismo.
El conocimiento explicito se instala en el cerebro hasta convertirse en implícito, solamente que la respuesta al no pasar por el neocórtex, depende del estado emocional e instinto.
El conocimiento, en general pasa por los siguientes estadios:
A. DESCONOCIMIENTO INCONSCIENTE: Es decir que se ignora que sabemos y que no sabemos sobre algún tema o circunstancia, hasta que aparece la necesidad de usar este recurso y se pasa al siguiente estadio.
B. DESCONOCIMIENTO CONSCIENTE: Es cuando estas consciente de tu falta de conocimiento sobre algo. Entonces aprendemos lo necesario para resolver la circunstancia.
C. CONOCIMIENTO CONSCIENTE: Aquí es donde usamos lo que sabemos y comenzamos a esforzarnos por la técnica. Somos conscientes de lo que sabemos y podemos evidenciar el uso del mismo.
D. CONOCIMIENTO INCONSCIENTE: En este nivel el cerebro actúa de forma automática usando lo que sabe sin conciencia de que lo usa, es decir es automático.
Con lo anterior, podremos definir de manera más precisa la intuición de la siguiente forma:
La intuición es una capacidad de la mente, de tomar de forma inconsciente del entorno un sin número de variables, significarlas y generar un escenario no necesariamente lógico, que nos obliga a tomar de nuestro conocimiento implícito e inconsciente una respuesta.
El escenario no es necesariamente lógico, debido a que las variables evaluadas son consistentes con el campo cognitivo de cada individuo e influenciadas por las emociones circunstanciales y el grado de afección que el cerebro percibe para sí y que impelen el instinto de supervivencia.
[tweet «La intuición es la capacidad de usar el conocimiento inconsciente»]
Podría decirse que la búsqueda inconsciente del cerebro en el campo cognitivo esta asociada a las condiciones del medio en que ocurre el problema, y este sondea su repertorio buscando similitudes que a simple vista parecen no existir, pero sin embargo valida muchas de las variables involucradas en la búsqueda, tomando mayor peso las referencias que involucran emociones y supervivencia, a fin de determinar la respuesta que nosotros denominamos intuitiva.
Esta forma de definir la intuición libra de pensar que se trata de un don especial, siendo entonces una facultad adquirida, mediante la exposición de nuestra mente a procesos de aprendizaje y respuesta explícitos, que son arraigados de implícitamente.
Los juegos ayudan a desarrollar conexiones neuronales, por lo que una aplicación practica para el fortalecimiento de respuestas intuitivas es participar en juegos diseñados con la finalidad de crear experiencias que involucren variables que el cerebro pueda significar en futuras situaciones.
Se sabe de las cualidades de los analistas financieros que suelen simplificar su entorno en función de variables que inciden de forma trascendente en sus actividades, la determinación sustentada de las variables trascendentes, el análisis de tendencias y la construcción de los escenarios más probables, se realiza mediante lo que denominamos análisis Prospectivo. No obstante con el tiempo estos analistas no requieren de la herramienta prospectiva, pues con solo ver algunos indicadores críticos, son capaces de intuir el comportamiento de los mercados.
También podríamos de paso, definir la especulación, como el Arte de usar de forma intuitiva variables impactantes y crear escenarios congruentes con la información disponible, aun cuando no se pueda elaborar una Prospección.